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Agronom�a Tropical. 28(2): 71-85.1978

PRINCIPALES LIMITACIONES Y POTENCIAL AGRICOLA DE LAS TIERRAS EN VENEZUELA

J. Comerma* y R. Parede**

* Centro Nacional de Investigaciones Agropecuarias. CENIAP-FONAIAP. 
Maracay-Venezuela.
 **Inventario Nacional de Tierras, MARNR.
Fecha de Recepci�n: 17-10-77.


INTRODUCCION

El conocimiento global de las principales limitaciones y potencialidades del recurso tierra en Venezuela, es esencial para orientar el ordenamiento y zonificaci�n de las actividades agr�colas, viales, urban�sticas, recreacionales, etc., as� como para se�alar algunas de las �reas de investigaci�n agr�cola prioritarias y en general para crear conciencia sobre este importante recurso natural renovable. La precisi�n que se logre en presentar esta visi�n, depende del grado de cobertura y detalle de los estudios de suelos y agroecol�gicos previos y en las premisas que se usen para definir tanto las limitaciones como las potencialidades.

La �ltima prospecci�n sobre la disponibilidad de tierras agr�colas en Venezuela se hizo con motivo de la publicaci�n, "La Agricultura Deseable, una prospecci�n del a�o 2000"(10), en cuyo momento se dispon�a de una menor cobertura de estudios b�sicos que en la actualidad. En el mismo trabajo se concluy� que s�lo alrededor de un 2 por ciento estaba constituido por tierras de buena calidad agr�cola; un 1 O por ciento dej� mediana calidad aptas para agricultura, pero con severas limitaciones; un 44 por ciento aptas para pastos y Osques sin restricciones; un 42 por ciento aptas para cultivos permanentes s�lo en ciertas �reas y para pastos y bosques con restricciones y por �ltimo un 2 por ciento de baja calidad, debido a factores extremos de drenaje y salinidad.

Con la informaci�n disponible hoy en d�a nos proponemos analizar las principales limitantes y potenciales de las tierras en Venezuela as� como de las premisas en que nos basamos para obtenerlas. Esta prospecci�n sobre las tierras del pa�s est� fundamentalmente basada en aspectos f�sicos-naturales, con las limitantes de escasez de informaci�n que persisten aun para algunas �reas y considerando ciertos aspectos sociales y tecnol�gicos existentes, pero no se pretenden considerar todos los elementos necesarios para una zonificaci�n del uso agr�cola m�s apropiado que deba d�rsele a la tierra en todos los rincones de Venezuela. Debemos entender que adem�s de las limitaciones impuestas por la aun escasa informaci�n b�sica de suelos, agroclimatol�gica, disponibilidad de agua para riego, etc., se suman el poco �nfasis que en este trabajo se le da a los factores econ�micos y sociales.

MATERIALES Y METODOS

Los principales y m�s recientes estudios sobre tierras, que cubren �reas considerables fueron sintetizados y vertidos a un mapa de Venezuela a escala 1: 1.500.000.

Entre otros cabe destacar los siguientes estudios utilizados del Inventario Nacional de Tierras de COPLANARH: Cuenca del Lago de Maracaibo (11), Cuenca de los r�os Unare Never� (9), regi�n Centro-Oriental (12), regi�n Nor-Occidental (13), Delta del R�o Orinoco (14), Y los suelos y las aguas en la regi�n Llanera (17). Igualmente se  utiliz� la informaci�n proveniente de los siguientes informes: Atlas I del Inventario Nacional de Recursos de Venezuela (1), Atlas del Territorio Federal Amazonas y Distrito Cede�o del Estado Bol�var (5), Recursos Agr�colas y Forestales del Estado Barinas (16), Los principales suelos y paisajes del Estado Apure (6), Clases de tierra en la Hoya del Lago de Valencia (2), Estudio Agrol�gico tipo Reconoc� miento Zona de Barlovento (3); adem�s se utiliz� el mapa de Zonas de Vida o Bioclim�ticas (15), para delimitar las regiones �ridas y semi�ridas en Venezuela, las zonas de p�ramos, los diferentes bosques excesivamente h�medos o de gran altura. Por �ltimo fueron tambien Consultados los mapas de Suelos .de Venezuela de los a�os 1964 (4) Y 1971 (7) del M.A.C.

Toda la informaci�n b�sica anterior y de inter�s a este trabajo, fue sintetizada en el mapa 1: 1.500.000 y sobre el mismo se hicieron las interpretaciones para el mapa de grandes limitaciones y el mapa de potencial de uso de la tierra con las premisas que siguen a continuaci�n:

Premisas sobre Limitaciones

Los criterios usados para el mapa de grandes limitaciones fueron: aridez, relieve excesivo, baja fertilidad y mal drenaje. Sin duda existen uno o m�s de dichos factores u otros adicionales, que puedan estar limitando el uso agr�cola de una determinada zona y sin embargo �sta aparecer� generalizada con una sola de las anteriores grandes limitantes, es ello as� fundamentalmente por considerar dicha limitante como prioritaria, as� como tambi�n por razones de falta de informaci�n m�s precisa y por una simplificaci�n cartogr�fica que consideramos necesaria.

En el criterio aridez se han incluido todas aquellas zonas bioclim�ticas que no permiten cosechas sostenidas sin riego con los cultivos comerciales comunes del pa�s, con excepci�n del sisal que se produce en algunas de dichas �reas (8).

En el relieve excesivo incluimos aquellas �reas que por tener pronunciadas pendientes o por la complejidad de las mismas (colinas, cerros y monta�as), implican grandes dificultades para la agricultura mecanizada y/o representan un alto riesgo de erosi�n para los cultivos limpios comunes del pa�s.

La limitaci�n por baja fertilidad de los suelos abarca todas las areas en las cuales por raz�n de la escasez de nutrimientos y/o excesiva acidez, no es posible la producci�n de cultivos comunes y/o los rendimientos de los mismos son bajos y que se agotar�n a corto plazo si no se corrigen dichas limitaciones a trav�s de un uso frecuente de cantidades moderadas a altas de fertilizantes y enmiendas.

La limitaci�n por mal drenaje o deficiencia de ox�geno implica excesos de agua ya sea superficial o en el subsuelo, que fundamenmente afectan el crecimiento vegetal. la mecanizaci�n o laboreodel terreno, y los rendimientos de cultivos comunes, con excepci�n de arroz y de ciertos pastos naturales.

Las zonas consideradas con escasas limitaciones para su uso agr�cola, corresponden a zonas esencialmente planas, con pocos problemas de drenaje y de fertilidad natural. as� como tambi�n poseen condiciones agroclim�ticas que permiten el desarrollo de una gran variedad de los cultivos que se efect�an comercialmente en el pa�s. En estas zonas y por razones cartogr�ficas se incluyen �reas que aun poseen alguna de las limitaciones observadas, pero as� mismo en las �reas marcadas con limitaciones existen �reas sin las mismas, por lo cual se considera que existe un cierto balance en los resultados finales.

Premisas sobre Uso Potencial

Para este mapa es necesario establecer ciertas consideraciones. Una de ellas se refiere al t�rmino "agr�cola", el cual es utilizado en su concepci�n amplia, incluyendo tanto su uso en la producci�n de cultivos comestibles por el hombre, como tambi�n la producci�n de pastos y de especies forestales. As� al decirse que una zona tiene una amplia y/o limitada gama de uso agr�cola implica la aptitud para los tres renglones antes mencionados. Consecuentemente con lo anterior, no se est� indicando el uso econ�mico o social m�s favorable de una porci�n de terreno, sino su aptitud agrof�sica (fundamentalmente integrando suelo, agroclima, relieve y drenaje). As� por razones econ�micas o sociales, una zona con una gran aptitud agr�cola puede, en un per�odo dado, ser utilizada m�s favorablemente en producci�n ganadera o forestal que en producir cultivos comestibles. Sin embargo se considera que como en general los cultivos para alimentaci�n directa del hombre exigen condiciones de terreno de mejor calidad o con menos limitaciones que los pastos y bosques, deben ser considerados prioritariamente en este an�lisis.

Otra de las consideraciones se refiere a que s�lo se contemplan cultivos, pastos y �rboles forestales que actualmente se producen en forma comercial en el pa�s, sin tomar en cuenta aquellos cultivos que requieren condiciones especiales del terreno, como el caso del arroz, el cual se adapta a suelos con bajas tasas de infiltraci�n de agua y que al ser inundado compite favorablemente con otras especies. Asi mismo dentro de los cultivos estamos enfatizando aquellos que suplen material directamente para la alimentaci�n y el vestido del hombre (maiz, caraota, cacao, algodon, etc.) 

En el mapa de potencial de tierra es necesario tambi�n definir la plicaci�n de un cierto nivel de tecnolog�a por parte de los agricultores pues de ello depende en sumo grado la perspectiva que sobre la aptitud de las tierras se presente. Esto es, si por un lado consideramos un nivel tecnol�gico que no es capaz de eliminar en ning�n caso, las limitantes de baja fertilidad o de mal drenaje, las aptitudes en general ser�an muy estrechas; por el contrario si asumi�ramos el uso de tecnolog�as que en general superan la mayor�a de las limitaciones existentes, las aptitudes ser�an muy amplias. Por el mismo dinamismo de las tecnolog�as las aptitudes var�an con el tiempo, por lo que en un an�lisis potencial hay que ubicarse en las condiciones de un per�odo determinado. En este caso se est�n considerando tecnolog�as que ya est�n siendo aplicadas por investigadores agr�colas y grupos de agricultores considerados avanzados, pero que aun su aplicaci�n no es de car�cter masivo. Entre otras se incluyen la aplicaci�n racional de enmiendas y fertilizantes, labores de drenaje superficial (ej. camellones y/o bancales), pr�cticas de conservaci�n de suelo (ej. terrazas), aplicaci�n de riego en aquellas zonas en que ya se conocen fuentes seguras de agua apropiada, etc. As� a pesar de que nos limitamos a pr�cticas tecnol�gicas que ya son usadas por ciertos agricultores, lo cual introduce un elemento de realismo a las perspectivas, se asume una masificaci�n de las mismas por el resto de los agricultores, lo cual la hace bastante optimista. 

Cuando en el mapa nos referimos a una unidad como de amplia gama de uso agr�cola, los cultivos que se enfatizan son aquellos que fundamentalmente son mecanizables, que requieren suelos con buen drenaje, con buena capacidad de retenci�n de agua, adem�s de niveles apropiados de nutrimentos. Los cultivos incluidos en la escala de limitada gama de uso agr�cola, conciernen a aquellos que rueden producirse satisfactoriamente en condiciones particulares tates como: de relieve excesivo (ej. caf� bajo sombra), en climas basante h�medo (cacao, palma africana, musaceas), o en climas con deficiencias de agua o con lluvias concentradas (ej. sorgo), as� como aquellos cultivos que se adaptan a suelos con drenaje deficiente (ej. arroz). tanto en el caso de unidades con amplia o limitada gama de uso agricola es necesario destacar que las unidades calificadas con la misma aptitud no implican que tendr�n una igual adaptabilidad a

Figura 1.
Figura 1.

 

 

Figura 2.
Figura 2.


cultivos dados, sino que el n�mero de cultivos adaptables ser� aproximadamente el mismo.

RESULTADOS

En la Figura 1 se presenta un mapa de Venezuela se�alando las principales limitaciones en las tierras para su uso agr�cola.

El �rea con limitaciones por aridez, abarca alrededor de un 4 por ciento de la superficie nacional, y se encuentra ubicada fundamentalmente en planicies o sistemas de colinas de la Costa Norte de Venezuela. Las m�s importantes sublimitaciones de esta regi�n son: erosi�n acelerada en �reas planas y de colinas, alta proporci�n de relieves con fuerte pendiente sobre todo como colinas y una alta proporci�n de suelos con excesos de arcilla, sales y/o sodio en las zonas planas. Sin embargo, existen considerables �reas sin otras limitaciones que la aridez, sobre todo en los alrededores de la ciudad de Maracaibo, las cuales dependen de suplencia de riego para ser f�cil y provechosamente incorporadas a la agricultura.

La zona con limitaciones de drenaje abarca aproximadamente un 18 por ciento del Territorio Nacional. Su ubicaci�n predominante est� en las grandes planicies aluviales como las del Sur del Lago de Maracaibo, los Llanos Centrales y Occidentales y el Delta del Orinoco. Por su topograf�a tan plana, los problemas fundamentales son de drenaje superficial al permitir el estancamiento de las aguas de lluvia y en menor escala provenientes del desborde de los r�os. El grado de severidad del problema se indica con diversos tonos de azul; as� el azul m�s oscuro se�ala las zonas peor drenadas o casi cenagosas, las cuales abarcan la mayor superficie, o un 45 por ciento del total mal drenado; las zonas con tonos medios indican superficies con problemas intermedios y ocupan alrededor de un 22 por ciento y las de problemas m�s leves son indicados con los tonos m�s claros de azul y ocupan alrededor de un 33 por ciento del total mal drenado. En la gran generalidad de los casos estas zonas tienen tambi�n otras limitaciones, como suelos muy pesados dif�ciles de mecanizar racionalmente y un patr�n de distribuci�n de suelos muy complejo que dificulta el planeamiento masivo del uso agr�cola de la tierra. Otras �reas mal drenadas como el suroeste del r�o Apure poseen limitaciones de fertilidad y otras como en el Delta del Orinoco, poseen suelos org�nicos y �reas de suelos �cido sulfatados, sobre los cuales no existe experienCia acerca de su manejo exitoso en e pais.


El �rea se�alada con limitante prioritario de baja fertilidad alrrededor del 32 por ciento de la superficie nacional. Su concentracion Principal est� en los Llanos Centrales y Orientales, as� como tambi�n en la region Sur del pais. De esta zona alrededor del 87 por ciento se considera que posee muy fuertes limitaciones de fertilidad (marcado en rojo oscuro), lo cual implica el uso de enmiendas como cal as� como frecuentes y moderadamente altas tasas de fertilizaci�n, para la mayor�a de los cultivos actuales del pa�s, a menos que se utilizaran cultivos adaptados a dichas condiciones como ser�a el caso del caucho, en las regiones humedas del Sur de Venezuela. El 13 por ciento restante (rosado) corresponde a suelos con condiciones menos desfavorables de fertilidad natural, siendo por lo tanto m�s f�cil y menos costoso resolver este problema. En general las zonas de baja fertilidad de suelos corresponden a tierras planas o suavemente onduladas, bien drenadas y de f�cil mecanizaci�n, teniendo como factores sublimitantes m�s. comunes, una baja capacidad de retenci�n de humedad por la amplia extensi�n de suelos arenosos tanto en las sabanas Orientales como en las del sur del Estado Apure.

La limitante por excesivo relieve abarca aproximadamente un 44 por ciento de la superficie total del pa�s. Est�n all� comprendidos los dos ramales de la Cordillera Andina, la Cordillera de la Costa y la regi�n monta�osa del Sur del pa�s, que constituyen el 57 por ciento del total con esta limitante en su grado m�s fuerte (color marr�n) y los sistemas de colinas asociados a dichos sistemas monta�osos, que abarcan el 43 por ciento restante e implican un menor grado de limitaci�n (color gris). Especialmente al Sur del Orinoco dicha limitante est� exagerada pues existen grandes altiplanicies que no tienen pendientes excesivas, pero por ser la cartograf�a aun defiCiente y la poblaci�n tan escasa, hemos aceptado por ahora dicha generalizaci�n. En relaci�n a esta limitante en el norte del Orinoco, es conveniente se�alar que en todas las �reas demarcadas existen peque�os valles que est�n siendo intensiva mente utilizados con cultivos hort�colas, aprovechando las condiciones fitosanitarias favorables del clima fresco, as� como tambi�n que existen muchas laderas monta�as utilizadas con cultivos especiales como el caf� y ciertos frutales, sin producirse da�os serios por erosi�n. Entre las princies sublimitantes dentro de los sistemas monta�osos del norte del pa�s, se cuentan las de la erosi�n actual, suelos poco profundos, Pedregosos, ciertas �reas con baja fertilidad y otras con climas secos y/o con posibilidades de heladas, mientras que en la regi�n Sur la sublimitante que destaca es la de suelos arenosos y de muy baja fertilidad.

Por �ltimo, queda alrededor de un 2 por ciento que puede en general ser considerado sin limitantes para su uso agr�cola. Dentro de dichas �reas existen no s�lo peque�as zonas que poseen alguna de las limitantes anteriores sino que a�n en los suelos considerados sin limitaciones, surgen ciertas inc�gnitas, tales como su laboreo, las cuales deben ser resueltas para un uso exitoso a largo plazo.

En la Figura N� 2 se presenta el mapa de Potencial de Tierras para uso Agr�cola bajo las premisas antes se�aladas.

Los resultados de esta prospecci�n indican que existen alrededor de un 4 por ciento de �reas con amplia gama de uso agr�cola. 14 por ciento con una limitada gama, un 30 por ciento fundamentalmente para uso ganadero, un 41 por ciento para bosques, recreaci�n reservas hidr�ulicas, etc., y un 11 por ciento que posee una asociaci�n de �reas con limitada gama de uso agr�cola y de zonas limitadas a bosques y recreaci�n.

De la comparaci�n de ambos mapas se pueden derivar algunas conclusiones relativas a las implicaciones que tendr�a la aplicaci�n de tecnolog�as. como las descritas anteriormente, las cuales deben superar limitaciones que las tierras poseen.

Con relaci�n a las tierras de posible utilizaci�n en una amplia gama de cultivos, es de notar su correspondencia con las zonas de escasas limitaciones y que las �reas incorporadas, a partir de zonas con limitaciones, se logren a trav�s del drenaje como es el caso del sur del Lago de Maracaibo y Llanos Altos Occidentales, o a trav�s del riego como en la zona norte del Lago de Maracaibo.

La superficie de tierras de posible utilizaci�n con limitada gama de cultivos est� fundamentalmente compuesta por tierras incorpOradas a trav�s del mejoramiento del drenaje, pero as� mismo es tambi�n notorio las incluidas debido a la aplicaci�n de fertilizantes, en algunos casos unido a ciertas pr�cticas de riego y conservaci�n de suelos. En el primer caso pueden citarse como ejemplo zonas de 105 Llanos Altos Sur-Occidentales y de la Cuenca del Lago de Maracaibo.

mientras que en el segundo caso tenemos principalmente los Llanos centrales y parte de los Orientales.

Las �reas con aptitud fundamentalmente para ganader�a comprenen general dos grandes situaciones. Por un lado se tiene en la dena central y Occidental del pa�s, �reas con fuertes problemas de mal drenaje usuamente uno a una alta proporcion de suelos pesados a suelos con bajos niveles de fertilidad. O sea que a�n y cuando fuera posible t�cnica y econ�micamente solucionar el drenaje, todav�a permanecer�an otros problemas por solucionar. La otra gran situaci�n se refiere al Oriente y Centro Sur del pa�s, donde los suelos son bien drenados, pero de muy baja fertilidad y con problemas de baja capacidad de retenci�n de agua por ser muy arenosos. En algunas de estas zonas marcadas s�lo para ganader�a es posible el desarrollo de ciertos cultivos tolerantes al mal drenaje, como el arroz y en otras el desarrollo de cultivos que aun pueden producir economicamente en suelos con baja fertilidad y en �reas subh�medas como el Pino Caribe, merey, yuca, etc., o en zonas bastante h�medas como en el Sur del pa�s para caucho, cacao, etc.

Por �ltimo, las zonas limitadas a bosques, recreaci�n, reservas hidr�ulicas, etc., representan �reas que no disponen de agua ya sea natural o artificialmente en los momentos actuales, o �reas con alto peligro de erosi�n por estar ubicadas en laderas muy empinadas o sobre medanos, o �reas con suelos org�nicos y/o �cidos sulfatados, cuyo manejo es desconocido y por �ltimo �reas que no se conocen bien o donde existe muy poca poblaci�n y en cuyo caso se toma la Posici�n de mantenerlas en su estado natural o el de usarlas con cultivos como caucho, cacao, caf� u otros que provean una cobertura similar a la del bosque original.

CONCLUSIONES

Venezuela dispone para su uso agr�cola de una muy baja proporci�n de tierras (2 por ciento), que pr�cticamente no tienen limitaciones grof�sicas. La mayor�a de las mismas est�n limitadas en orden de Importancia, de acuerdo a su extensi�n por las siguientes razones excesivo relieve (44 por ciento), baja fertilidad natural (32 sin ciento), falta de drenaje (18 por ciento), y aridez (4 por ciento); Por embargo, por la factibilidad de aplicar tecnolog�as ya conocidas, razones de distribuci�n de la poblaci�n y por el tipo de cultivos requeridos para alimentar la poblaci�n, el mejoramiento del drenaje, la aplicaci�n de fertilizantes y la aplicaci�n de riego, aparecen e este momento como las tecnolog�as ya conocidas, que mayor impacto tendr�an en aumentar la disponibilidad de tierras agr�colas.

Con la aplicaci�n de tecnolog�as ya probadas por investigador y agricultores avanzados, es posible extender dicha disponibilidad d tierras hasta aproximadamente un 4 por ciento del total nacion para ser usadas con una limitada gama de cultivos, en un 30 por ciento para ser usadas en ganader�a, en un 41 por ciento para bosques, recreaci�n, conservaci�n de cuencas, vida silvestre, etc., y en un 11 por ciento para este �ltimo fin en estrecha mescolanza con �rea aptas para un uso con limitada gama de cultivos.

Esta escasez de tierras de buena calidad, a�n con una visi�n o timista de la aplicaci�n de la tecnolog�a apropiada y disponible de los actuales momentos, es necesario destacarla en funci�n de factores tales como el uso actual, tenencia, programas de desarroll agr�cola, etc., Aun cuando no existe una cartograf�a reciente acerca del uso actual de la tierra en todo el pa�s, es ampliamente conocido que algunas �reas siendo utilizadas en ganader�a extensiva, tiene aptitudes- para cultivos o usos m�s intensivos que son m�s exige tes en suelos; as� mismo en ciertas �reas, principalmente en la regi�n Central, suelos de alta calidad agr�cola se est�n ocupando con fines urbanos y tambi�n est� sucediendo en otras �reas el caso opuesto, por ejemplo, �reas monta�osas con cultivos limpios, tod lo cual tiene implicaciones econ�micas, sociales, ecol�gicas y pol�ticas negativas.

La soluci�n de los problemas anteriores implica varios tipos de medidas, entre las cuales destacan la zonificaci�n de cultivos, zonificaci�n de la producci�n de renglones agr�colas, la distribuci�n racional de cr�ditos y obras infraestructura les de apoyo agr�cola (carre teras, silos, etc.) , el impuesto predial, catastro, control del precio de las tierras, incremento de la investigaci�n y asistencia t�cnica, etc., en otras palabras es necesario que el Estado intervenga activamente para lograr que este recurso escaso (tierras de buena ca lidad), sea utilizado racionalmente y que produzca mayor beneficio social y econ�mico para la poblaci�n venezolana actual y futura.

RESUMEN

El conocimiento global de las principales limitaciones y potenciabilidades del recurso tierra en Venezuela, es esencial para orientar el ordenamiento y zonificaci�n de las actividades agr�colas, viales, urbanisticas, recreacioanles, etc., asi como para senalar a gunas de �reas de investigaci�n agr�cola prioritarias y en general para crear conciencia sobre este importante recurso natural renovable. La precisi�n que se logre en presentar esta visi�n, depende del grado de cobertura Y detalle de los estudios de suelos y agroecol�gicos previos Y en las premisas que se usen para definir tanto las limitaciones como las potencialidades.

Con la informaci�n disponible hoy en d�a se analizan las principales limitantes Y potenciales de las tierras en Venezuela en base a un grupo de premisas que se establecen:

Las principales conclusiones son:

Venezuela dispone para su uso agr�cola de una muy baja proporci�n de tierras (2 por ciento), que pr�cticamente no tienen limitaciones agrof�sicas. La mayor�a de las tierras est�n limitadas en orden de importancia, de acuerdo a su extensi�n, por las siguientes razones: excesivo relieve (44 por ciento), baja fertilidad natural (32 por ciento), falta de drenaje (18 por ciento) y aridez (4 por ciento); sin embargo, por la factibilidad de aplicar tecnolog�as ya conocidas, por razones de distribuci�n de la poblaci�n y por el tipo de cultivos requeridos para alimentar la poblaci�n, el mejoramiento del drenaje, la aplicaci�n de fertilizantes y la aplicaci�n de riego aparecen en Este momento como las tecnolog�as que mayor impacto tendr�an en aUmentar la disponibilidad de tierras agr�colas.

con la aplicaci�n de tecnolog�as ya probadas por investigadores Y. agricultores avanzados, es posible extender dicha disponibilidad de tierras hasta aproximadamente un 4 por ciento del total nacional para ser usadas con una amplia gama de cultivos, en un 14 por ciento para ser usadas con una limitada gama de cultivos, en un 30 por ciento Para ser usadas en ganadena, en un 41 por ciento para bosques, recreacion conservaci�n de cuencas, vida silvestre, etc., y en un 11 por Ciento para este �ltimo fin en estrecha mescolanza con �reas aptas para un uso con limitada gama de cultivos.

SUMMARY

The knowledge of the main limitations and potentialities of the lands in Venezuela, is essential in order to orientate the territorial Oro dering, the zonification of activities as agriculture, communications Urbanization, recreation, etc., as well as to be able to indicate some of the priorities in agricultural research and to create conscience about this important natural resource. The precision obtained depends on the coverage and detail of soil and agroecologial studies, and on the premises used to define limitations as well as potencialities.

The results indicate that Venezuela has about 2 percent of its territory almost without limitations. Most of the land is restriced for its agricultural use, according to its extent, by relief (44 percent), loy;� natural fertility (32 percent) drainage problems (18 percent) and ario dity (4 percent). Nevertheles by the factibility of appling certain tecnologies, already proved in the country, and considering the distribution of population, the type of crops required to feed our inhabitants etc., the improvement of drainage, the application of fertilizers and irrigation seem as the mayor contributors to increase availability of agrio cultural land.

The availability of land could be increased to about 4 percent for an ample group of crops, to 14 percent for a limited group of crops, to 30 percent for grazing, to 41 percent for forest, recreation, wildlife, etc. and 11 percent for this last purpose mixed with areas with capability for limited crops.

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